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Aprende cómo curar marihuana con esta sencilla guía paso a paso. Mejora el sabor, la suavidad y la conservación de tu cannabis con este proceso único.
Curar la marihuana es un paso esencial para aprovechar todo el potencial de los cogollos. Este proceso no solo mejora el sabor y el aroma, sino que también proporciona una experiencia de fumar más suave y una mayor potencia. En esta guía aprenderás todo sobre el proceso de curado, los mejores métodos y los errores comunes que debes evitar.
El curado ofrece numerosos beneficios:
El curado de la marihuana está influenciado por diversos factores ambientales, como la luz, el calor y la humedad.
La exposición a la luz UV puede degradar los cannabinoides como el THC, reduciendo su potencia. Por eso, es fundamental almacenar los cogollos en un lugar oscuro, preferiblemente en frascos de vidrio resistentes a los rayos UV.
Las altas temperaturas aceleran la descomposición de cannabinoides y terpenos. La temperatura ideal para el curado es entre 18-22°C. Una temperatura estable ayuda a preservar la calidad de los cogollos.
La humedad es clave en el curado. Niveles por encima del 65% pueden generar moho; por debajo del 55% los cogollos se secan demasiado. Lo ideal es mantener una humedad entre el 58-62% con higrómetros y packs reguladores como Boveda.

Antes de curar, los cogollos deben secarse colgándolos boca abajo en un lugar oscuro y bien ventilado. Temperatura ideal: 18-22°C; humedad: 50-60%.
Para más información visita nuestro Blog: Secado de marihuana: sabor, aroma y potencia óptimos
Lo mejor son frascos de vidrio herméticos. También se pueden usar bolsas o contenedores especiales con control de humedad.
Llena los frascos hasta un 75% de su volumen con cogollos. Regula la humedad abriéndolos regularmente ("burping").
Usa un higrómetro. Nivel óptimo: 58-65%. Si hay demasiada humedad, deja el frasco abierto unas horas.
Entre 4-8 semanas. Puede prolongarse hasta 6 meses para una mayor calidad.
Cada método tiene ventajas y retos:
Método tradicional y efectivo. Permite un curado lento y controlado.

Se utilizan bolsas de papel o microperforadas. Permiten una salida de humedad más lenta.
Los cogollos se sumergen varios días en agua, eliminando sustancias no deseadas. Puede afectar el perfil de terpenos. Es crucial un secado posterior adecuado para evitar moho.
Sí. Un curado excesivo puede reducir aroma y potencia. Ideal: entre 4 semanas y 6 meses.
Aroma intenso, textura ligeramente pegajosa y humo suave.
Las primeras 2 semanas sí; luego se puede espaciar.
Riesgo de moho. Usa higrómetro y packs absorbentes como Boveda.
Con el almacenamiento adecuado, tu marihuana se mantendrá fresca, aromática y potente por mucho tiempo.
El curado es un paso crucial para lograr marihuana de alta calidad. Con paciencia y cuidado, obtendrás mejor sabor, humo más suave y mayor potencia.
¡Novus Fumus te desea mucho éxito curando tus cogollos!
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